Amanecía soleado. Nada más levantarnos escuchamos un gran murmullo enfrente de la clínica, que se ha traducido en el día con más pacientes desde que llevamos aquí.
Además el día comenzó con sorpresa, dos nuevos mellizos nacidos hace unos 20 días venían en brazos de dos mujeres del pueblo: su madre había muerto y pedían ayuda para poder alimentarlos. Así que Jose Luis nos ha enseñado el procedimiento.
Lo primero, darles un nombre y registrarlos: ya hay un Guillermo y una Maribel Sissei por Sierra Leona. Después enseñarles como preparar el biberón y darles la primera toma.
Finalmente les damos la leche de iniciación y prometemos visitarlos pronto.
Después un día bastante movido. Muchos pacientes entre nuevos y revisiones. La mayoría han mejorado con los tratamientos que les dimos. Incluso un bebe que nos tenía preocupados.
Una vez terminada la consulta y con el sol pegando fuerte hemos ordenado en el almacén algunas cajas de fármacos con el objetivo de llevar los menos útiles aquí, hasta el hospital. Una partidilla de ping-pong casero y a cenar.
Los días tan movidos pasan si cabe más rápido y dejan menos tiempo para reflexionar un poco todo lo que nos está pasando, a lo tonto estamos casi en el ecuador de nuestro viaje y en breve tocará recoger equipajes y vivencias y seguir adelante.

hay un guillermo leonés!!!!! q cosa tan mona!!! ^.^
ResponderEliminarxo no penséis aún en hacer equipajes....eso se piensa la noche de antes,hasta entonces, se vive al máximo! (y se escribe xa contarlo...) :)